La ministra de Sanidad de España, Mónica García, ha expresado su disposición a examinar la posibilidad de implementar un mecanismo que permita a los trabajadores con baja médica reincorporarse gradualmente a sus labores. Esta declaración se produjo durante el acto de apertura del curso político Madrid en Marcha, celebrado el 5 de octubre de 2024 en la capital española.
García enfatizó que las bajas laborales son determinadas exclusivamente por los profesionales médicos, no por los empresarios. Esta afirmación surge en un contexto donde el sistema de Seguridad Social español, establecido hace más de un siglo, enfrenta desafíos modernos en la gestión de incapacidades temporales.
La ministra, quien es médica anestesista de profesión, señaló que si la titular de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, inicia un diálogo para reformar la incapacidad temporal, se considerarán todas las propuestas. Este enfoque refleja la complejidad del sistema actual, donde las bajas pueden extenderse hasta 365 días, con posibilidad de prórroga.
García destacó la importancia de proteger los derechos de los pacientes y evitar presiones indebidas para retornar prematuramente al trabajo. Esta postura se alinea con las preocupaciones sobre el presentismo laboral, un fenómeno creciente en España donde los empleados acuden a trabajar aun estando enfermos.
"Los propios médicos y algunas asociaciones también de pacientes nos dicen que a lo mejor la reincorporación al trabajo tiene que ser paulatina y tenemos que buscar mecanismos"
Es crucial recordar que el estrés laboral es responsable de aproximadamente el 30% de las bajas en España, y el síndrome de burnout fue reconocido como enfermedad laboral por la OMS en 2019. Estos factores subrayan la necesidad de un enfoque más flexible y centrado en el bienestar del trabajador.
La ministra también abordó un incidente reciente de vandalismo contra su vehículo, ocurrido la semana anterior. García atribuyó este acto a la creciente crispación política, acusando a la oposición de fomentar un ambiente de acoso hacia sus adversarios.
Es importante contextualizar estas discusiones en el marco más amplio de la salud laboral en España. Con una tasa de absentismo del 7,5% en 2023 y un coste anual de bajas laborales que supera los 7.000 millones de euros, es evidente la necesidad de un debate profundo sobre estas cuestiones.
La propuesta de García de considerar una reincorporación paulatina al trabajo se alinea con las recomendaciones del Pacto de Toledo sobre la gestión de incapacidades laborales. Esta iniciativa podría representar un paso significativo hacia un sistema más adaptado a las necesidades actuales de los trabajadores y empleadores españoles.