La Generalitat Valenciana, bajo el liderazgo del presidente Carlos Mazón, ha revelado un ambicioso plan para revitalizar el sector industrial de la región. Este programa, presentado el 30 de septiembre de 2024, incluye una inyección inmediata de 48,5 millones de euros destinados a 787 pequeñas y medianas empresas industriales.
Esta iniciativa forma parte de una estrategia más amplia que busca modernizar y fortalecer el tejido industrial valenciano. La Comunidad Valenciana, conocida por su diversidad económica que abarca desde la agricultura hasta el turismo, está apostando fuerte por su sector industrial. El objetivo es aumentar la contribución de la industria al Producto Interno Bruto (PIB) regional del 14,8% actual al 20% en los próximos años.
El plan de ayudas se enfoca en la inversión en activos materiales e inmateriales, con el propósito de modernizar las líneas de producción y mejorar la eficiencia. Se espera que esta inversión inicial genere un efecto multiplicador, estimulando una inversión total de más de 166 millones de euros por parte de las pymes beneficiarias.
La Estrategia de Reindustrialización no se limita a las ayudas financieras directas. Mazón anunció la creación del Hub de Impulso de Suelo Industrial, una iniciativa que busca expandir el espacio disponible para la actividad industrial en hasta 10 millones de metros cuadrados en los próximos seis años. Este proyecto trabajará en conjunto con la Oficina Valenciana de Inversiones para atraer nuevas inversiones a la región.
El plan también aborda el desarrollo de infraestructuras críticas. Se han mencionado proyectos como el Eje de la Cerámica de Castellón, que potenciará una industria que ya es líder en España en la producción de azulejos y pavimentos cerámicos. Además, se planea mejorar la conectividad con la Autovía de la Vega Baja y la estación intermodal de Sagunto, este último siendo un punto estratégico dado que el Puerto de Sagunto es gestionado por la Autoridad Portuaria de Valencia, junto con los puertos de Valencia y Gandía.
La colaboración entre el sector privado, la academia y los centros de investigación es otro pilar fundamental de esta estrategia. Se busca fomentar la digitalización y la innovación tecnológica en las empresas valencianas. La región cuenta con recursos importantes para este fin, como el Parque Tecnológico de Valencia y la Universidad de Valencia, una de las más antiguas de España, fundada en 1499.
"Este esfuerzo inversor en las pequeñas y medianas empresas valencianas se va a incrementar al menos un 10% en los próximos años"
La soberanía energética también forma parte integral de esta visión de reindustrialización. El gobierno valenciano está finalizando un Plan Director Energético Integral que se centrará en fuentes de energía renovable como el hidrógeno verde, el biogás, la energía solar y la eólica. Se han establecido objetivos ambiciosos de alcanzar 6.000 megavatios de potencia fotovoltaica y 4.000 de energía eólica.
Este plan de reindustrialización se presenta en un momento crucial para la economía valenciana. La región, que alberga importantes industrias como la automovilística, con la planta de Ford en Almussafes, y la del calzado en la zona de Elche, busca diversificar y fortalecer su base industrial para garantizar un crecimiento sostenible a largo plazo.