Alejo Schapire, escritor judío argentino de 51 años residente en Francia desde 1995, es conocido por su agudo sentido del humor. Sin embargo, el ataque terrorista de Hamás contra Israel, ocurrido hace un año, ha teñido su perspectiva de amargura. Esta transformación se refleja en su reciente obra "El secuestro de Occidente" (Libros del Zorzal), donde continúa su análisis y denuncia de lo que él denomina "delirios ideológicos".
Nacido en Buenos Aires en 1973, Schapire forma parte de la comunidad judía más grande de América Latina. Su traslado a Francia en 1995 lo situó en el país con la tercera población judía más numerosa del mundo, enriqueciendo su visión global. Esta experiencia multicultural ha influido significativamente en su trabajo.
El ataque de Hamás, organización fundada en 1987 durante la Primera Intifada, ha tenido un profundo impacto en Schapire. Este evento se enmarca en el largo y complejo conflicto israelí-palestino, cuyas raíces se remontan al siglo XX. La situación en la Franja de Gaza, bajo bloqueo desde 2007, y el aumento del antisemitismo en Europa en las últimas décadas, son temas que probablemente aborda en su libro.
"El secuestro de Occidente" parece explorar cómo los extremismos ideológicos están afectando a las sociedades occidentales. Schapire analiza cómo estos "delirios ideológicos" impactan en conceptos fundamentales como la libertad de expresión, un valor esencial en las democracias occidentales. Su obra se suma a la creciente tendencia de libros que examinan la polarización política y los desafíos que enfrenta el mundo globalizado.
La identidad cultural compleja de Schapire como expatriado judío argentino en Francia aporta una perspectiva única a su análisis. Su capacidad para entrelazar periodismo y literatura en obras de no ficción le permite abordar temas sensibles con profundidad y matices.
El libro de Schapire llega en un momento en que la crítica ideológica se ha convertido en una forma importante de discurso público. Al abordar el concepto de "delirios ideológicos", el autor invita a reflexionar sobre las creencias extremas o irracionales que pueden surgir en tiempos de crisis.
A pesar de la seriedad de los temas tratados, es probable que Schapire no abandone completamente su característico humor judío, una tradición con profundas raíces en la cultura y literatura. Este enfoque podría ofrecer un contrapunto valioso a la gravedad de los asuntos analizados en "El secuestro de Occidente".