Madrid celebra su otoño cultural con ferias de toros y libros antiguos
Madrid acoge simultáneamente ferias taurinas y de libros viejos este otoño. La 34ª Feria del Libro Viejo y Antiguo en Recoletos destaca entre los eventos culturales de la temporada.
En estos días, Madrid se engalana con sus tradicionales ferias de otoño, fusionando la pasión taurina con el amor por los libros antiguos. Esta combinación única refleja la rica herencia cultural de la capital española, donde la tauromaquia y la literatura han coexistido durante siglos.
La 34ª edición de la Feria del Libro Viejo y Antiguo adorna el emblemático Paseo de Recoletos, transformándolo en un tesoro literario al aire libre. Este evento, que se celebra desde 1989, se ha convertido en un pilar de la vida cultural madrileña, atrayendo a bibliófilos y curiosos por igual. Madrid, con más de 40 librerías especializadas en libros antiguos, demuestra su compromiso con la preservación del patrimonio literario.
Entre los volúmenes expuestos, se pueden encontrar joyas relacionadas con la tauromaquia, un tema profundamente arraigado en la cultura española. La tradición taurina en Madrid se remonta al siglo XVI, y la ciudad ha sido testigo de la evolución del toreo desde sus inicios. La Plaza de Toros de Las Ventas, inaugurada en 1931, sigue siendo el epicentro de esta tradición, albergando la prestigiosa Feria de San Isidro.
"Tampoco escribo para los que se titulan aficionados independientes, porque no los hay que no dependan, por lo menos, de su apasionada ceguera y de su endiosado orgullo"
Esta cita de Felipe Sassone refleja la intensidad de la afición taurina, un sentimiento que ha inspirado a numerosos escritores a lo largo de la historia. Ernest Hemingway, por ejemplo, era un apasionado de los toros y plasmó esta fascinación en sus obras.
La confluencia de las ferias taurinas y literarias en Madrid no es casualidad. Ambas tradiciones han nutrido la identidad cultural de la ciudad durante generaciones. El primer tratado sobre tauromaquia se publicó en 1796, coincidiendo con la popularización del toreo a pie en el siglo XVIII. Paralelamente, la Feria del Libro de Madrid, una de las más antiguas de Europa, inició su andadura en 1933, demostrando el compromiso de la ciudad con la difusión de la cultura escrita.
La riqueza cultural de Madrid se extiende más allá de estas ferias. El Museo Taurino exhibe trajes, carteles y objetos históricos, mientras que la Biblioteca Nacional de España, ubicada en Recoletos, alberga millones de libros, incluyendo valiosas colecciones taurinas. El Ateneo de Madrid, fundado en 1835, continúa siendo un faro cultural, y la Casa de Vacas en el Retiro ofrece exposiciones que a menudo incluyen temas taurinos.
La declaración de la tauromaquia como Patrimonio Cultural Inmaterial en España en 2013 subraya la importancia de esta tradición. Sin embargo, es en la intersección con la literatura y otras formas de arte donde la tauromaquia encuentra su expresión más profunda y duradera.
Mientras los aficionados debaten apasionadamente sobre los toreros en Las Ventas, los amantes de los libros exploran los tesoros literarios en Recoletos. Esta yuxtaposición de pasiones define el otoño cultural madrileño, recordándonos que la historia y la tradición siguen vivas en las calles de la capital española.
