El juicio del mediático caso Pinto, que involucra al Javier López Madrid y al ex comisario José Villarejo, ha sido aplazado por un año más. La Audiencia Provincial de Madrid ha fijado una nueva fecha para este proceso, que debía haber comenzado esta semana, tras aprobar la solicitud de aplazamiento de uno de los acusados.
La Fiscalía Provincial de Madrid solicita 13 años y dos meses de prisión para ambos acusados por presuntos delitos de lesiones, coacciones y amenazas contra la doctora Elisa Pinto. Este caso, que se remonta a 2012, ha captado la atención pública debido a la prominencia de los acusados y la gravedad de las acusaciones.
Los hechos comenzaron cuando la doctora Pinto, entonces jefa del servicio de dermatología del Hospital San Camilo, entabló una amistad con López Madrid. Según la acusación, esta relación se deterioró, llevando a una serie de amenazas y agresiones. El Ministerio Público alega que López Madrid contrató a Villarejo, descrito como parte de las "cloacas del Estado", para hostigar a Pinto y evitar que lo denunciara.
La acusación detalla un patrón de hostigamiento que incluía llamadas telefónicas amenazantes, mensajes intimidatorios y dos agresiones físicas. Estos actos habrían alterado gravemente la vida de la doctora y su familia, obligándoles a contratar seguridad privada y cambiar sus rutinas diarias.
"López Madrid quiere que cierres la boca"
El aplazamiento del juicio ha generado controversia, con las acusaciones sugiriendo que podría ser resultado de maniobras de los acusados. Este retraso se suma a una serie de obstáculos que han prolongado el caso durante casi una década.
El juicio promete ser uno de los más seguidos en España, dada la implicación de figuras prominentes y las graves acusaciones de abuso de poder y recursos policiales para fines personales. La asociación Clara Campoamor también ejerce como acusación popular en este caso, subrayando su importancia social.
Este caso pone de relieve la vulnerabilidad de las víctimas de acoso y la complejidad de los procesos judiciales en casos de alto perfil. La resolución de este juicio podría tener implicaciones significativas para la justicia española y la percepción pública de la influencia en los círculos de poder.