Felipe VI aboga por diálogo franco en relaciones hispanoamericanas

El rey de España enfatiza la importancia del respeto mutuo en las relaciones con Latinoamérica, en medio de tensiones diplomáticas con México. Felipe VI llama a centrarse en el presente y futuro compartidos.

4 de octubre 2024, 11:26  •  48 vistas

Felipe VI aboga por diálogo franco en relaciones hispanoamericanas

En un discurso pronunciado el 4 de octubre de 2024 durante el encuentro de Academias Hispanoamericanas de la Historia en Trujillo, Felipe VI ha abogado por un diálogo franco y respetuoso en las relaciones entre España y Latinoamérica. Este llamado se produce en un contexto de tensiones diplomáticas, particularmente con México, tras la ausencia de representación española en la reciente toma de posesión de la presidenta Claudia Sheinbaum.

El monarca español destacó la profundidad de los lazos que unen a los países iberoamericanos, enfatizando que esta relación "es tan honda que nos permite, incluso, hablar con franqueza de nuestras posibles discrepancias inevitables, por lo demás, en tantos siglos de historia compartida pero siempre desde el respeto basado en la amistad". Esta declaración refleja la importancia de la diplomacia en un momento delicado para las relaciones hispanoamericanas.

La ausencia de Felipe VI en la toma de posesión de Sheinbaum el 1 de octubre de 2024 marcó un hito, ya que el rey había asistido a 86 ceremonias similares desde su época como Príncipe de Asturias. La decisión de no invitar al monarca español se atribuyó a un supuesto agravio ocurrido en 2019, cuando el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador solicitó disculpas por el período del virreinato, petición que no fue respondida por razones constitucionales.

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Es importante contextualizar que el virreinato de Nueva España, establecido en 1535, duró hasta 1821, abarcando un período significativo de la historia compartida entre España y México. La independencia de México, declarada el 16 de septiembre de 1810, marcó el fin de esta era colonial, pero los lazos culturales y lingüísticos han perdurado.

Felipe VI hizo hincapié en la necesidad de orientar el foco de las relaciones hacia el presente y el futuro: "Por eso lo esencial es tomar impulso en tanto que nos une, en nuestras afinidades, para a fin de cuentas alcanzar respuestas pragmáticas, útiles y equilibradas. Respuestas que lleguen a todos". Esta perspectiva subraya la importancia de construir sobre los cimientos comunes, como el idioma español, que es el segundo más hablado del mundo por número de hablantes nativos.

La polémica sobre las disculpas históricas ha generado debate en ambos lados del Atlántico. Mientras que figuras políticas como Irene Montero han respaldado la petición de disculpas, el gobierno español mantiene su posición. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, reiteró que "si el Jefe del Estado no está invitado, España no está invitada", reflejando la unidad institucional en esta cuestión diplomática.

"Con los países iberoamericanos nos unen la historia y lazos muy intensos de afecto y hermandad. En las últimas décadas, también nos unen lazos económicos crecientes y visiones cada vez más cercanas sobre lo global. Pero sobre todo nos une nuestra lengua y nuestra cultura compartidas. Un activo de inmenso valor que debemos potenciar con determinación y generosidad"

Felipe VI en su discurso de Proclamación en 2014

El rey español recordó estas palabras de su discurso de Proclamación, pronunciado hace una década, reafirmando su vigencia y la importancia de la Comunidad Iberoamericana de Naciones, fundada en 1991, como plataforma para fortalecer los lazos entre las naciones hispanoamericanas.

En un mundo globalizado, donde instituciones como el Instituto Cervantes, fundado en 1991, promueven activamente el español y la cultura hispana, el llamado de Felipe VI a centrarse en el presente y el futuro compartido adquiere especial relevancia. La historia compartida, que incluye hitos como el establecimiento de la Real Academia Española en 1713 y la creación del Premio Cervantes en 1975, sirve como base para construir relaciones más sólidas y mutuamente beneficiosas en el siglo XXI.