En un giro inesperado, el debate vicepresidencial entre J.D. Vance y Tim Walz se desarrolló de manera más civilizada y centrada en políticas que el enfrentamiento previo entre Kamala Harris y Donald Trump. El evento, celebrado el 30 de septiembre de 2024 en la cadena CBS, mostró un tono marcadamente diferente al anterior, reflejando la posibilidad de un diálogo político más constructivo.
J.D. Vance, autor del aclamado libro "Hillbilly Elegy", demostró ser un orador hábil y preparado. Su desempeño sorprendió a muchos, presentando un perfil más moderado y presidenciable. Vance, graduado de la Facultad de Derecho de Yale en 2013, logró navegar temas complejos como el aborto y el cambio climático con destreza, mostrando su capacidad para adaptar su discurso a diferentes audiencias.
Por su parte, Tim Walz, con una extensa carrera política que incluye 12 años en el Congreso y 5 como gobernador de Minnesota, tuvo un inicio nervioso, especialmente en temas de política exterior. Sin embargo, mejoró notablemente al abordar asuntos domésticos, aprovechando su experiencia en políticas públicas concretas.
Una diferencia clave con el debate Harris-Trump fue la ausencia de animosidad personal entre los candidatos. Vance y Walz se trataron con respeto mutuo, centrándose en las políticas de sus líderes más que en ataques personales. Este enfoque civilizado demostró que es posible tener un debate político sustancial sin la presencia dominante de figuras como Trump.
El debate se llevó a cabo en un momento crítico, a poco más de un mes de las elecciones del 5 de noviembre de 2024. Las encuestas muestran un resultado extremadamente reñido, reflejando la profunda división del país. Este contexto se ve agravado por recientes catástrofes naturales, como el ficticio huracán Helene, y tensiones internacionales.
La experiencia en comunicación de ambos candidatos jugó un papel crucial. Vance, con su experiencia en los Marines y apariciones regulares en Fox News, mostró soltura ante las cámaras. Walz, aunque con menos experiencia televisiva, logró mejorar su desempeño a medida que avanzaba el debate.
Curiosamente, ambos candidatos emplearon técnicas similares para evadir temas incómodos. Vance recurrió a su historia personal de superación, mientras que Walz se enfocó en su experiencia como profesor y entrenador.
"Mi experiencia personal, viniendo de una familia pobre y desestructurada, me ha enseñado la importancia de la seguridad nacional y las oportunidades educativas que ofrecen los programas militares."
Este debate, aunque probablemente no mueva significativamente el voto indeciso, demostró la posibilidad de un diálogo político más constructivo. Ocurrió, curiosamente, el día en que Jimmy Carter, conocido por otorgar un papel prominente a su vicepresidente Walter Mondale, cumplía 100 años.
En el contexto más amplio, es importante recordar que las elecciones presidenciales en EE.UU. se celebran cada cuatro años, y el papel del vicepresidente, aunque a menudo subestimado, incluye ser presidente del Senado según la Constitución. La verificación de hechos en vivo durante el debate, una práctica que se volvió común en la década de 2010, añadió un elemento de responsabilidad a las declaraciones de los candidatos.