Un juzgado de Huesca ha emitido una resolución que permite el acceso inmediato al yacimiento neolítico de la cueva de Chaves, ubicada en la Sierra de Guara, en el Prepirineo aragonés. Esta decisión, tomada el 20 de septiembre de 2024, autoriza la reanudación de las investigaciones arqueológicas en este importante sitio prehistórico.
La cueva de Chaves, descubierta en 1974 por el arqueólogo Vicente Baldellou, es considerada uno de los yacimientos neolíticos más significativos de la península ibérica. Con una antigüedad de aproximadamente 7.000 años, el sitio contiene evidencias cruciales de la transición de sociedades cazadoras-recolectoras a comunidades agrícolas y ganaderas, que marcó el inicio del Neolítico en la región alrededor del 5600 a.C.
El auto judicial responde a una solicitud presentada por la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón en la primavera de 2024. Esta petición buscaba acceder al yacimiento para realizar nuevas excavaciones e investigaciones por parte de la Universidad de Zaragoza, institución que ha desempeñado un papel fundamental en los estudios arqueológicos de la zona.
La resolución también autoriza la celebración de jornadas de puertas abiertas, permitiendo a la sociedad aragonesa conocer de primera mano las labores de recuperación de este valioso patrimonio. Estas actividades de divulgación son esenciales para fomentar la comprensión y apreciación del rico legado prehistórico de la región.
Es importante destacar que el yacimiento se encuentra en un coto de caza privado, lo que ha generado conflictos legales en el pasado. Sin embargo, el juzgado ha reafirmado la legitimidad del Gobierno de Aragón para acceder e investigar el sitio, en cumplimiento de su deber estatutario de proteger el patrimonio arqueológico.
La cueva de Chaves no solo alberga restos neolíticos, sino también pinturas rupestres del Paleolítico Superior, formando parte de un complejo sistema kárstico. Los hallazgos en el sitio, que incluyen cerámica, herramientas de piedra y restos óseos, han proporcionado información invaluable sobre las prácticas funerarias y la vida cotidiana de nuestros antepasados.
La directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, Gloria Pérez, ha expresado su satisfacción por esta autorización, que permitirá continuar las investigaciones en 2024 y 2025. Diversas asociaciones, como Apudepa y Ecologistas en Acción Huesca, también han celebrado la decisión, recordando la importancia de cumplir con la sentencia de 2018 que busca revertir la propiedad del sitio al dominio público.
Esta resolución marca un hito importante en la protección y estudio del patrimonio arqueológico aragonés, permitiendo avanzar en nuestra comprensión del Neolítico en la península ibérica y contribuyendo a la preservación de un legado cultural de incalculable valor para las generaciones futuras.