El 2 de octubre de 2024, el embajador de Irán en Madrid, Reza Zabib, ofreció una conferencia de prensa crucial tras el reciente ataque de su país contra Israel. Este evento diplomático se produjo apenas un día después de que Irán lanzara una ofensiva con misiles contra territorio israelí, provocando la activación de sirenas y el refugio de ciudadanos en búnkeres.
Zabib declaró: "Damos por terminada la operación", pero advirtió firmemente: "A todos los ataques Irán va a responder más fuerte, no vamos a dudar". Esta declaración refleja la postura firme de Irán, un país con una población de más de 85 millones de habitantes y una historia que se remonta a más de 7000 años.
El diplomático justificó la acción militar como una respuesta a lo que Irán considera "líneas rojas" cruzadas por Israel. Entre estas, mencionó el asesinato de Ismael Haniya, líder político de Hamas, el del embajador de Irán en Líbano, y la muerte de un general iraní el 27 de septiembre de 2024. Zabib argumentó que estas acciones dejaron a Irán sin más opción que reaccionar, invocando el artículo 14 de la ONU sobre defensa propia.
Es importante contextualizar que Irán lidera un "eje de resistencia" que incluye a Hamas en Gaza, Hizbulá en Líbano, y los hutíes en Yemen. Este conflicto se enmarca en una región compleja donde Irán comparte fronteras con siete países, incluyendo Irak y Afganistán.
Zabib hizo hincapié en que la operación ha concluido, pero advirtió: "Si algún iraní es objetivo, nuestra reacción será más fuerte". Esta postura refleja la determinación de Irán, un país que, a pesar de las sanciones internacionales, mantiene una de las tasas de alfabetización más altas de Oriente Medio y posee la cuarta reserva de petróleo más grande del mundo.
El embajador también abordó la cuestión nuclear, afirmando que Irán no posee armamento de este tipo, pero está "preparado" para responder si es necesario. Cabe recordar que el programa nuclear iraní ha sido objeto de controversia internacional durante años.
"Irán está preparada para tomar medidas defensivas si fuera necesario, para proteger nuestro territorio de cualquier agresión militar. A todos los actos irán va a responder más fuerte. Irán no va a dudar. La situación está clara"
Zabib concluyó haciendo un llamado a la desescalada, pero dejando claro que la pelota está en el campo de Israel y sus aliados. Esta situación tensa se desarrolla en un país donde el Islam chiíta es la religión oficial y que cuenta con 22 sitios del Patrimonio Mundial de la UNESCO, reflejando su rica historia y cultura.
La bandera iraní ondeaba a media asta en la embajada, simbolizando el luto por las víctimas y la gravedad de la situación. Mientras el mundo observa con atención, la resolución de este conflicto podría tener implicaciones significativas para la estabilidad regional y global.