La política catalana atraviesa un momento de cambios profundos que afectan la estabilidad del gobierno del PSC. Los comunes y ERC (los principales aliados del gobierno) están en medio de una re-estructuración que podría afectar los planes presupuestarios
El partido Barcelona en Comú enfrenta una transición después de que Ada Colau dejara su posición en el ayuntamiento; mientras Jéssica Albiach también abandona su rol como coordinadora. La nueva dirección (que será asumida por Candela López y Gemma Tarafa) tomará control en nov-17‚ aunque con menor influencia política que sus predecesoras
ERC se encuentra en una situación aún más compleja: el partido tiene programada una elección el 30-nov donde Oriol Junqueras y Xavier Godàs son los principales candidatos. Si ninguno obtiene más del 50% de votos habrá una segunda vuelta a mediados de dic; lo que complica el panorama político-administrativo
- La aprobación del presupuesto para inicios-2025
- El desarrollo de la financiación singular
- La ampliación de la Hacienda Catalana
- La gestión del IRPF regional para 2026
Si el Govern socialista no cumple no merecerá seguir
Salvador Illa intenta mantener el control de la situación; pero la portavoz Sílvia Paneque ya admitió que será complicado cumplir con las fechas previstas para el presupuesto. El PSC necesita encontrar un balance entre las demandas de sus socios y la necesidad de avanzar con su agenda gubernamental