En el panorama musical-digital actual un grupo de estafadores ha creado un elaborado sistema de engaño en Spotify (la plataforma europea de streaming que aún no genera ganancias)
La investigación revela que solo 20 individuos manejaban más de 500 identidades diferentes; creando una red de artistas-fantasma que generaban reproducciones artificiales. Este grupo usaba técnicas sofisticadas para crear perfiles falsos y música auto-generada: logrando millones de streams
- Creación de perfiles falsos con nombres inventados
- Uso de música generada por computadora
- Manipulación de reproducciones
- Cobro de regalías ilegítimas
El esquema funcionaba de manera simple pero efectiva — los estafadores subían música sin valor real y utilizaban bots para generar reproducciones artificiales. Las ganancias se acumulaban mientras los usuarios reales de Spotify no sospechaban que estas “canciones“ aparecían en sus listas aleatorias
La plataforma ha implementado nuevos sistemas de verificación; aunque expertos señalan que este tipo de fraude es difícil de detectar por completo. Los responsables aprovecharon las debilidades del sistema de pago-por-reproducción que Spotify utiliza para compensar a los artistas