Vox Madrid cambia de liderazgo: Fúster reemplaza a Monasterio

En un significativo cambio organizativo, Vox, el partido político español de extrema derecha fundado en 2013, ha anunciado una modificación en su estructura de liderazgo en Madrid. Rocío Monasterio, quien ha estado al frente de la formación en la capital desde sus inicios, dejará su puesto como presidenta regional por decisión de la dirección nacional.

Este ajuste, que es puramente orgánico, no afectará la posición de Monasterio como portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, donde continuará desempeñando un papel crucial en la representación mediática e institucional del partido. La dirección nacional ha expresado su agradecimiento por la labor de Monasterio en la implantación del partido en la región, destacando que bajo su liderazgo, Vox logró presentar candidaturas en todas las alcaldías en las últimas elecciones municipales.

José Antonio Fúster, actual portavoz nacional de Vox, asumirá el cargo de presidente del partido en Madrid. Este cambio responde a la necesidad de renovar la presidencia regional, cuyo mandato había expirado desde el último proceso interno de primarias en 2020. Es importante señalar que una modificación en los estatutos del partido en 2022 otorgó a la dirección la facultad de realizar nombramientos territoriales sin consultar a la militancia.

Vox, conocido por sus posturas controvertidas, se ha caracterizado por su oposición a la autonomía regional y su defensa de un estado centralizado. El partido ha sido objeto de críticas por sus políticas anti-inmigración y su postura contra los derechos LGBTQ+. Además, ha propuesto medidas polémicas como la construcción de un muro en las fronteras de Ceuta y Melilla y la deportación masiva de inmigrantes irregulares.

Desde su entrada en el Congreso de los Diputados en 2019, Vox ha ganado notoriedad por sus propuestas radicales, incluyendo la ilegalización de partidos independentistas y la derogación de leyes de memoria histórica. El partido también ha sido acusado de promover teorías conspirativas y desinformación, así como de mantener una postura negacionista frente al cambio climático.

En el ámbito social, Vox se opone al aborto y al matrimonio entre personas del mismo sexo, posiciones que han generado controversia y oposición de diversos sectores de la sociedad. El partido también ha sido criticado por su retórica considerada xenófoba, islamófoba y antifeminista.

A pesar de las críticas, Vox ha logrado una presencia significativa en la política española, ganando sus primeros escaños en el Parlamento Europeo en 2019. Su crecimiento ha sido comparado con el de otros partidos de extrema derecha en Europa, como el Frente Nacional francés.

El cambio de liderazgo en Madrid marca un nuevo capítulo para Vox en la capital, mientras el partido continúa promoviendo su agenda de recentralización del Estado y oposición a la forma actual de la Unión Europea, abogando por una "Europa de las naciones".