Tensión diplomática: México excluye al Rey Felipe VI de la toma de posesión presidencial

La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, no invita al Rey Felipe VI a su toma de posesión, generando tensiones con España. Políticos españoles de izquierda asisten al evento y apoyan la decisión.

2 de octubre 2024, 17:06  •  0 vistas

Tensión diplomática: México excluye al Rey Felipe VI de la toma de posesión presidencial

La decisión de Claudia Sheinbaum, primera mujer elegida presidenta de México, de no invitar al Rey Felipe VI a su toma de posesión ha generado tensiones diplomáticas entre México y España. Este evento, que marca un hito histórico en la política mexicana, ha sido el escenario de un debate sobre las relaciones históricas entre ambos países.

La ceremonia de investidura, celebrada el 1 de octubre de 2024 en el Palacio Nacional de México, sede del Poder Ejecutivo Federal, contó con la presencia de representantes de diversos países, pero la ausencia del monarca español fue notoria. Esta decisión se enmarca en el contexto de la llamada "cuarta transformación", un término político acuñado por el predecesor de Sheinbaum, Andrés Manuel López Obrador.

Irene Montero, eurodiputada española, expresó su apoyo a la decisión de Sheinbaum y sugirió que España debería pedir perdón por los eventos ocurridos durante la conquista de México, que comenzó en 1519 y concluyó en 1521. Montero hizo referencia al mural "Epopeya del pueblo de México" de Diego Rivera, ubicado en el Palacio Nacional, como un recordatorio de la historia compartida entre ambas naciones.

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La toma de posesión, que se realiza cada seis años en México, incluyó elementos de las culturas indígenas del país. Se escucharon varias de las 68 lenguas originarias reconocidas como nacionales por la Constitución mexicana, incluyendo el náhuatl, maya y zapoteco, resaltando la rica diversidad cultural del país.

Otros políticos españoles de izquierda, como Jon Iñarritu de Bildu y Gerardo Pisarello de Sumar, también asistieron al evento. Pisarello destacó la importancia histórica de México en la acogida del exilio republicano español, que comenzó principalmente en 1939 tras la Guerra Civil Española.

Es importante señalar que las relaciones diplomáticas entre España y México se restablecieron en 1977 tras el fin del franquismo, y desde entonces han sido generalmente cordiales. Sin embargo, este incidente ha reavivado debates sobre la necesidad de reconciliación histórica.

La exclusión del Rey Felipe VI, quien ascendió al trono español en 2014, de este evento significativo en la política mexicana, plantea interrogantes sobre el futuro de las relaciones bilaterales. México, que obtuvo su independencia de España en 1821, ha experimentado una transformación política significativa en las últimas décadas, pasando de un sistema de partido único a una democracia multipartidista.

La elección de Sheinbaum como primera mujer presidenta de México, casi 45 años después de que se eligiera a la primera mujer gobernadora de un estado mexicano en 1979, representa un avance importante en la participación política de las mujeres en el país.

Este evento también pone de relieve la complejidad del sistema político mexicano, una república federal presidencialista donde el Congreso de la Unión, compuesto por la Cámara de Diputados y el Senado, juega un papel crucial en el equilibrio de poderes.

"Sería muy bueno que [el Rey Felipe VI] viera este mural y se fijara en los detalles porque se daría cuenta de que España sí tiene muchas cosas por las que pedir perdón al pueblo de México".

Irene Montero, eurodiputada española

La tensión diplomática generada por esta situación plantea desafíos para ambos países en cuanto a la gestión de sus relaciones futuras, especialmente considerando los fuertes lazos culturales, históricos y económicos que unen a España y México.