Rusia conquista Vugledar: un giro estratégico en la guerra del Donbás
El ejército ruso toma control de Vugledar, logrando su mayor victoria en meses. Esta conquista abre el camino para el dominio del sur del Donbás, marcando un punto de inflexión en el conflicto ucraniano.
En un giro significativo de los acontecimientos en el conflicto ucraniano, el ejército ruso ha logrado su mayor victoria militar en más de seis meses al tomar el control de Vugledar, una fortaleza estratégica que abre las puertas al sur del Donbás. Esta ciudad minera, fundada en 1964 y con una población previa a la guerra de aproximadamente 15,000 habitantes, se ha convertido en un punto de inflexión en la contienda.
Las autoridades de la autoproclamada república popular de Donetsk, leales a Moscú, han confirmado el izamiento de la bandera tricolor rusa en el edificio de la administración local. En respuesta, Kiev ha anunciado la retirada de sus tropas, que habían defendido este bastión desde los primeros intentos rusos en marzo de 2022.
La conquista de Vugledar representa el mayor éxito para el Kremlin desde la toma de Avdivka en febrero de 2024. Esta victoria tiene una importancia estratégica crucial, ya que la ciudad está situada en una elevación que domina la región circundante, a unos 50 km al suroeste de la ciudad de Donetsk.
El cambio en las tácticas rusas ha sido fundamental para este logro. Abandonando los ataques frontales con brigadas mecanizadas, que resultaron en grandes pérdidas, Moscú optó por una estrategia de desgaste, utilizando pequeños destacamentos que atacaron por los flancos. Esta nueva aproximación, junto con la toma de las explotaciones mineras al norte de la ciudad, facilitó el asalto final que comenzó hace menos de dos semanas.
La pérdida de Vugledar es una consecuencia directa de la acuciante falta de personal ucraniano para mantener las posiciones, según han reconocido militares ucranianos en la televisión. Esta situación ha llevado a demandas de una nueva movilización en Ucrania.
Con la caída de Vugledar, Rusia tiene ahora el camino expedito para hacerse con el control de todo el sur del Donbás. Los analistas pronostican que en las próximas semanas, Ucrania podría perder el control de otras localidades estratégicas como Pokrovsk, Toretsk y Kurajove, esta última rica en recursos de litio, un mineral crucial para la tecnología moderna.
El avance ruso también se dirige hacia el este, con el objetivo de asediar Velika Novosilka, otra importante fortaleza cerca de la frontera entre Donetsk y Zaporiyia. Esta última región alberga la central nuclear más grande de Europa, añadiendo una capa adicional de complejidad al conflicto.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha reconocido la gravedad de la situación en el frente oriental a su regreso de Estados Unidos, donde solicitó autorización para el empleo de misiles de largo alcance contra territorio ruso, una propuesta que el Kremlin considera una línea roja.
La guerra en Ucrania, que ha provocado la mayor crisis de refugiados en Europa desde la Segunda Guerra Mundial, continúa teniendo un impacto global en los precios de la energía y los alimentos. La importancia de Ucrania en estos sectores subraya las ramificaciones internacionales del conflicto, que se extienden mucho más allá de las fronteras del Donbás.
"Efectivamente, nuestros soldados se encuentran ya en Vugledar, en el edificio de la administración local se ha izado la bandera rusa"
La caída de Vugledar marca un momento crucial en la guerra del Donbás, que ha sido una región disputada desde 2014. Con esta victoria, Rusia consolida su posición en el este de Ucrania y se prepara para nuevos avances, mientras que Ucrania se enfrenta al desafío de reorganizar sus defensas en un frente cada vez más presionado.
