PSE-EE rechaza el derecho a decidir en nuevo estatuto vasco

El Partido Socialista de Euskadi-Euskadiko Ezkerra (PSE-EE) ha manifestado su firme oposición a la inclusión del derecho a decidir en un nuevo estatuto para el País Vasco. Eneko Andueza, secretario general de los socialistas vascos, ha expresado que esta propuesta encubre el objetivo nacionalista de una Euskadi independiente de España y Europa, una idea que no contará con el respaldo de su partido.

Esta declaración contundente del PSE-EE tendrá repercusiones significativas en el panorama político vasco. El Partido Nacionalista Vasco (PNV), fundado en 1895 y considerado el partido nacionalista más antiguo de España, se verá obligado a moderar su postura soberanista para mantener la estabilidad institucional necesaria para reconectar con su electorado crítico.

Andueza ha anunciado la celebración del congreso del PSE-EE para los días 14, 15 y 16 de febrero de 2025, con el objetivo de "liderar" el País Vasco. Este evento se produce en un contexto político intenso, ya que solo una semana antes, el 8 de febrero, EH Bildu, una coalición de izquierda y nacionalista vasca formada en 2012, proclamará nuevamente a Arnaldo Otegi como su líder.

El líder socialista ha respondido indirectamente a las declaraciones de Andoni Ortuzar del PNV, reafirmando que el PSE-EE no renunciará a su posición sobre el derecho a decidir. Andueza ha destacado la unidad y fortaleza de su partido, contrastándola con la situación interna del PNV y la supuesta "falta de ideas y renovación" de EH Bildu.

Es importante recordar que el concepto de "derecho a decidir" surgió como una alternativa al término "autodeterminación" en el contexto político vasco y catalán. Sin embargo, el PSE-EE se mantiene firme en su posición de que cualquier reforma estatutaria debe realizarse "dentro de la más estricta legalidad", basándose en el acuerdo de gobierno firmado el 19 de junio de 2024.

El sistema político vasco, caracterizado por su multipartidismo y la tensión histórica entre nacionalismo y constitucionalismo, se enfrenta a un período crucial. Con 75 escaños en el Parlamento Vasco y un umbral electoral del 3%, los partidos compiten por influir en el futuro de la región.

Andueza ha expresado la aspiración del PSE-EE de liderar Euskadi "para hacerla mejor", buscando extender el crecimiento electoral logrado en 2023 y 2024. El partido tiene la vista puesta en las elecciones forales y locales de 2027, con el objetivo de consolidar su posición en las tres provincias vascas: Álava, Guipúzcoa y Vizcaya.

El debate sobre el nuevo estatuto se desarrolla en el marco del sistema autonómico vasco, que incluye instituciones como el Parlamento Vasco en Vitoria-Gasteiz y la policía autonómica Ertzaintza, creada en 1982. Además, el País Vasco goza de un sistema fiscal especial conocido como Concierto Económico, lo que añade complejidad a cualquier discusión sobre su estatus futuro.

En este contexto de diversidad lingüística y cultural, con el euskera como lengua cooficial junto al castellano, el PSE-EE busca posicionarse como una fuerza política capaz de liderar una Euskadi integrada en España y Europa, rechazando las aspiraciones independentistas de otros partidos.

"Nuestra aspiración es liderar este país. Queremos liderar Euskadi para hacerla mejor."

Esta declaración refleja la determinación del PSE-EE de jugar un papel central en el futuro político del País Vasco, manteniendo una postura firme frente a las propuestas nacionalistas y buscando un equilibrio entre la autonomía regional y la pertenencia a España y la Unión Europea.