Israel lanza operación terrestre en Líbano contra Hizbulá
Israel inicia incursiones limitadas en el sur del Líbano, marcando la primera operación terrestre contra Hizbulá en 18 años. El objetivo es alejar las posiciones de la milicia de la frontera israelí.
Por primera vez en 18 años, Israel ha iniciado una operación terrestre en el sur del Líbano contra Hizbulá. Esta acción marca un punto de inflexión en la escalada del conflicto entre ambas partes, que se ha intensificado en el último año bajo la sombra de la guerra en Gaza.
El ejército israelí ha anunciado incursiones terrestres limitadas y localizadas contra objetivos e infraestructura de Hizbulá en aldeas cercanas a la frontera. Estas operaciones se basan en inteligencia precisa y tienen como objetivo neutralizar amenazas inmediatas para las comunidades israelíes en el norte del país.
La decisión de Israel de llevar a cabo esta operación se debe a la necesidad de garantizar el retorno seguro de más de 60.000 habitantes del norte del país que fueron evacuados desde el 8 de octubre de 2023, cuando Hizbulá inició sus ataques en apoyo a Hamas y Gaza.
Hizbulá, fundada en 1985, es una organización política y militar libanesa con un amplio arsenal de misiles y cohetes. La guerra de 2006 entre Israel y Hizbulá duró 34 días y causó importantes daños en la infraestructura libanesa. Desde entonces, la tensión en la región ha sido constante, con frecuentes violaciones del espacio aéreo libanés por parte de Israel.
La operación actual se produce en un contexto de creciente preocupación internacional. La Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (UNIFIL), que opera en la zona desde 1978, ha intentado mediar en el conflicto en múltiples ocasiones. Sin embargo, la influencia política de Hizbulá en el Líbano y su apoyo financiero y militar de Irán complican los esfuerzos diplomáticos.
Israel ha tomado medidas preventivas, declarando tres comunidades en la Galilea como "zona militar cerrada y prohibida a civiles" hasta el 6 de octubre de 2024. Además, se han realizado intensos bombardeos aéreos y de artillería en el sur del Líbano.
La operación terrestre actual se considera "limitada" por fuentes estadounidenses e israelíes, pero representa un cambio significativo en la estrategia de Israel. El ejército israelí ha utilizado tecnología avanzada, como drones, en sus operaciones contra Hizbulá, y se ha enfocado en la red de túneles subterráneos desarrollada por la milicia.
El conflicto entre Israel y Hizbulá ha tenido repercusiones en toda la región de Oriente Medio y ha afectado significativamente la economía del sur del Líbano. La comunidad internacional sigue de cerca la situación, esperando que esta escalada no desemboque en un conflicto más amplio.
"El ejército comenzó incursiones terrestres limitadas, localizadas y dirigidas contra objetivos e infraestructura terrorista de Hezbolá en el sur del Líbano, basadas en inteligencia precisa. Estos objetivos están ubicados en aldeas cercanas a la frontera y representan una amenaza inmediata para las comunidades israelíes en el norte de Israel."
La operación actual plantea interrogantes sobre la estabilidad futura de la región y la posibilidad de una resolución pacífica del conflicto a largo plazo. Mientras tanto, los civiles de ambos lados de la frontera siguen siendo los más afectados por esta prolongada confrontación.
