Claudia Sheinbaum asume la presidencia de México con promesas de continuidad
Claudia Sheinbaum se convierte en la primera mujer presidenta de México, jurando continuar el legado de López Obrador. Enfrenta desafíos como la inseguridad y la corrupción en su mandato de seis años.
En un momento histórico para México, Claudia Sheinbaum ha asumido la presidencia del país, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar este cargo. La ceremonia de toma de posesión tuvo lugar el 1 de octubre de 2024 en la Cámara de Diputados de la Ciudad de México, marcando el inicio de un nuevo capítulo en la historia política del país.
Sheinbaum, quien obtuvo una victoria contundente en las elecciones de junio de 2024 con casi el 60% de los votos, recibió la banda presidencial de manos del ex presidente Andrés Manuel López Obrador. Este acto simbólico representa la transferencia pacífica del poder en la nación más poblada del mundo hispanohablante, con más de 130 millones de habitantes.
En su discurso inaugural, la nueva mandataria enfatizó la importancia histórica de su elección para las mujeres mexicanas y presentó una lista de 20 principios rectores para su gobierno de seis años. Entre estos principios se destacan:
- La condena a cualquier forma de discriminación
- El compromiso de hacer política a través del amor, la esperanza y la alegría
- La garantía de todas las libertades
- La continuación y profundización de los programas sociales iniciados por su predecesor
Sheinbaum reafirmó su compromiso con la llamada Cuarta Transformación, el proyecto político iniciado por López Obrador, y prometió continuar con el enfoque del "humanismo mexicano". Este concepto, acuñado por el ex presidente, busca distanciarse del modelo neoliberal que predominó en México durante las décadas de 1980 y 1990.
La nueva presidenta enfrenta desafíos significativos, incluyendo la inseguridad, la fuerte presencia del crimen organizado y la corrupción. Estos problemas han persistido a pesar de los esfuerzos realizados en los últimos años y representan una prueba crucial para el nuevo gobierno.
"Cualquiera que diga que habrá autoritarismo estará mintiendo"
La ceremonia contó con la presencia de varios líderes latinoamericanos, incluyendo a Lula Da Silva de Brasil, Gabriel Boric de Chile, Gustavo Francisco Petro de Colombia y Miguel Díaz Canel de Cuba, subrayando la importancia regional del evento.
Es importante destacar que México tiene una rica historia de movimientos sociales y luchas por los derechos humanos. La elección de Sheinbaum se produce en un contexto de creciente participación política de las mujeres en América Latina, siguiendo el ejemplo de líderes como Xiomara Castro en Honduras.
Tras la ceremonia oficial, la presidenta se dirigió al Zócalo, la plaza principal de la Ciudad de México y una de las más grandes del mundo, para celebrar con sus seguidores. Este espacio histórico, que ha sido testigo de numerosos eventos significativos desde la época colonial, se llenó de ciudadanos ansiosos por ver a su nueva líder.
El mandato de Sheinbaum se extenderá hasta 2030, sin posibilidad de reelección, de acuerdo con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos promulgada en 1917. Durante este período, la presidenta residirá en el Palacio Nacional, sede del poder ejecutivo desde la independencia de México en 1821.
La nueva administración hereda varios programas sociales emblemáticos, como el sistema de becas para jóvenes y adultos mayores, que han sido centrales en la política de reducción de la desigualdad. Sheinbaum ha prometido no solo mantener sino también fortalecer estas iniciativas.
En el ámbito internacional, México continúa siendo un actor clave en la región, siendo miembro del T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá) desde 2020. La forma en que Sheinbaum maneje las relaciones exteriores, especialmente con sus vecinos del norte, será crucial para el futuro económico y político del país.
