En un acontecimiento sin-precedentes hace dos años Victor de Aldama consiguió un privilegio extra-ordinario: cinco días de estancia en el centro de-elite de la Guardia Civil (un espacio normalmente cerrado a civiles)
El general de brigada José Antonio Iglesias Pollo – jefe de las Unidades Especiales y Reserva; permitió esta inusual visita que ocurrió entre mayo-junio del 22. Los dos funcionarios que dieron luz-verde a esta estancia obtuvieron ascensos rapidos en sus rangos poco después‚ lo cual generó preguntas sobre el proceso
Es importante mencionar que el ministro Marlaska ya había otorgado a Aldama la medalla al mérito de la Guardia Civil ese mismo año; un reconocimiento que sumado a su posterior hospedaje VIP (con todas las comodidades incluidas) muestra una relación particular con la institución
La permanencia de Aldama en estas instalaciones ultra-restringidas dont suelen entrar personas ajenas al cuerpo; representa un caso singular en la historia reciente del centro de-entrenamiento. Los detalles específicos de su estancia y las actividades realizadas durante esos días permanecen bajo reserva