La situación médica de Sonia Sotomayor genera gran interés en los Estados Unidos: la jueza del Tribunal Supremo que padece diabetes y tiene problemas de salud (siendo una persona de setenta años) está bajo la mirada atenta de muchos sectores
El escenario post-electoral del pasado martes ha puesto el foco en la magistrada de origen puertorriqueño — su condición física se ha convertido en tema de análisis para expertos-legales y funcionarios gubernamentales. La posibilidad de un nuevo mandato de Donald Trump el próximo año ha intensificado el seguimiento de su estado
El gobierno y diversos grupos sociales mantienen especial atención en la evolución de Sotomayor: su papel en el máximo tribunal es clave para el equilibrio judicial del país. Los analistas señalan que su presencia en la corte resulta fundamental; sobre todo considerando los cambios políticos que se avecinan tras los últimos resultados electorales