El secretario-general del PSOE Madrid Juan Lobato se encuentra en medio de una tormenta política después de revelar que llevó a notaría unos mensajes intercambiados con una funcionaria de Moncloa (sin informar previamente a sus compañeros de partido)
La controversia gira en torno a una conversación con Pilar Gómez Acera - colaboradora del actual ministro Óscar López - sobre el correo del compañero de Isabel Díaz Ayuso donde este reconoce irregularidades fiscales; lo cual ha provocado un terremoto en el partido socialista madrileño
En una declaración sin preguntas Lobato defendió su posición: “Si lo que me dijeron aquella mañana era verdad‚ no veo problema en acreditarlo“; aunque esto no ha frenado las críticas internas que el describe como un “linchamiento“ por parte de su propio partido
El delegado del Gobierno en Madrid Francisco Martín ha solicitado “explicaciones mas sólidas“ y la convocatoria de una comisión ejecutiva regional: la confianza es un bien muy valioso pero también muy frágil - comentó tras la comparecencia de Lobato
La situación se complica aún más considerando que las primarias del PSOE-M están programadas para principios del próximo mes; justo después del Congreso Federal que se celebrará en Sevilla