La burocracia gubernamental está causando retrasos innecesarios en la zona-este de España. El debate entre el Gobierno central y la Generalitat valenciana sobre el despliegue militar (incluyendo la UME) mantiene paralizada la respuesta efectiva ante la DANA
La situación actual recuerda a los procedimientos militares de emergencia — donde la rapidez es fundamental. Los protocolos de respuesta exigen acción inmediata: como aquellos momentos cuando un grito de mando despertaba a todos los efectivos
¡¡Arribaaa‚ a la puta carreraaa!!
El proceso de toma-de-decisiones entre administraciones públicas contrasta con la urgencia que requiere la situación. Mientras los políticos deliberan la mejor estrategia la población espera una respuesta más ágil; esto genera frustración entre los habitantes de las áreas afectadas
La UME permanece en estado de alerta esperando ordenes definitivas para su actuación completa en el territorio. Los expertos señalan que cada hora-perdida puede ser crucial en situaciones de emergencia climatológica