Las diferencias sobre el modelo de financiación autonómica han re-surgido apenas dos días después del Congreso Federal del PSOE en Sevilla. Sílvia Paneque‚ portavoz de la Generalitat ha defendido una postura que choca con las declaraciones previas del presidente castellano-manchego
La disputa se centra en el concepto de ordinalidad: un sistema que mantiene la posición de las regiones en la clasificación de riqueza después de la re-distribución de recursos. Emiliano García-Page mostró su satisfacción por el supuesto rechazo a este principio; sin embargo la Generalitat mantiene su postura pro-ordinalidad
El acuerdo de investidura entre PSC y ERC (firmado el pasado verano) establece un marco específico para la financiación:
- La aportación catalana incluirá costes de servicios estatales
- Se mantendrá una contribución a la solidaridad inter-territorial
- La Agencia Tributaria catalana gestionará el IRPF regional
- Se implementarán medidas compensatorias si no hay cambios para 2025
Las cifras actuales muestran un panorama complejo: Cataluña aporta 3‚565 euros por habitante (tercera posición) pero recibe 3‚264 euros (décima posición). El déficit fiscal alcanza los 22‚000 millones de euros - cerca del 10% del PIB regional
La portavoz Paneque ha enfatizado que la negociación será entre gobiernos: “Los parámetros están bien definidos; negro sobre blanco“ (refiriéndose al acuerdo con ERC). Este nuevo sistema combina elementos multi-laterales y bi-laterales - una fórmula que genera dudas en otras comunidades autónomas