En la madrugada del 17-nov‚ Rusia ejecutó un ataque masivo contra la infraestructura ucraniana causando estragos en varias regiones del país. El bombardeo (que incluyó misiles hipersónicos y drones) dejó al menos siete fallecidos y provocó apagones generalizados
Las fuerzas rusas dispararon aproximadamente 120 misiles y 90 drones contra instalaciones energéticas; afectando a Kiev‚ Odessa y otras ciudades importantes. El ministro de Energía German Galushchenko confirmó daños severos en centrales térmicas y redes de transmisión
Este es uno de los ataques aéreos más grandes desde el inicio de la invasión
Los impactos se registraron en múltiples ubicaciones:
- Mykolaiv: dos mujeres fallecidas y seis heridos
- Odessa: dos víctimas mortales
- Lviv: una mujer muerta en su auto
- Dnipropetrovsk: dos fallecidos en depósito ferroviario
El proveedor energético DTEK implementó cortes-preventivos en Kiev Donetsk y Dnipropetrovsk mientras que en Odessa; el transporte público eléctrico quedó paralizado. Los hospitales dependen ahora de generadores que según el alcalde Gennady Truhnov son insuficientes
El Ministerio de Defensa ruso justifica el ataque alegando que los objetivos eran instalaciones del complejo militar-industrial pero la realidad muestra un impacto directo en la población civil que enfrenta un duro invierno sin calefacción ni luz