Paiporta: La historia no contada de una ciudad sumergida en el caos tras la DANA
El devastador impacto de la DANA deja a Paiporta sin servicios básicos durante casi 100 horas. Los vecinos luchan contra el barro mientras tratan de recuperar sus hogares en medio de una mezcla de solidaridad y abandono
La vida en Paiporta se ha vuelto un desafío desde que la DANA golpeó el pueblo hace unos días: las calles están llenas de muebles rotos y los vecinos pelean contra el barro que está por todos lados
Trini‚ auxiliar de geriatría con 28 años viviendo en la localidad comparte su experiencia: “La vida sin agua y luz es un caos; pero lo peor es no tener casa y vivir de caridad“. Su hogar en la calle San Ramón muestra las cicatrices del desastre — las marcas del agua llegaron casi a los 2-metros de altura (y ahora vive con una amiga)
El proceso de limpieza es agotador; su vecina Tere de 48-años organiza brigadas de voluntarios para remover el lodo: “mis amigos preguntan qué necesito; les digo que vengan a ayudar porque la gente está muy cansada“. La situación se complica por la falta de servicios básicos: no poder lavarse después de trabajar todo el día con el barro; dormir cubiertos de fango
- Puestos de alimentos distribuidos por el pueblo
- World Central Kitchen sirviendo comida caliente
- Voluntarios llegando para ayudar
- Convoys de suministros básicos
La solidaridad muestra dos caras en esta crisis; mientras algunos vecinos permanecen indiferentes Tere señala: “solo mis vecinos marroquíes de arriba han bajado a ofrecer cuscús y ayudar con el barro“
Los servicios públicos empiezan a normalizarse: el 94% de los puntos eléctricos ya funcionan (reduciendo las incidencias de 240.000 a 14.000) y la mitad de las 550.000 líneas telefónicas están operativas