Netanyahu advierte a Irán y rechaza alto el fuego en la ONU

En un discurso cargado de tensión ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu lanzó una serie de advertencias directas a Irán y Hizbulá, rechazando las propuestas de alto el fuego y reafirmando la posición de Israel en el conflicto regional.

Netanyahu, quien ocupa el cargo de primer ministro desde diciembre de 2022, declaró: "Si nos atacan, los atacaremos. No hay un lugar en Irán al que los largos brazos de Israel no puedan llegar". Esta afirmación subraya la capacidad de Israel para realizar operaciones militares más allá de sus fronteras, una estrategia conocida como el "largo brazo de Israel".

La Asamblea General de la ONU, que se reúne anualmente en septiembre en Nueva York desde su fundación en 1945, fue escenario de protestas y salidas de delegados durante el discurso de Netanyahu. Entre los que abandonaron la sala se encontraban representantes del Líbano y los territorios palestinos, reflejando las tensiones persistentes en la región.

El conflicto israelí-palestino, con raíces que se remontan al siglo XX, ha visto una escalada reciente tras los ataques de Hamas en suelo israelí el 7 de octubre de 2023. Hamas, que controla la Franja de Gaza desde 2007, ha sido acusado de recibir apoyo de Irán, al igual que Hizbulá, una organización política y militar libanesa fundada en 1985.

En respuesta a la crisis, Estados Unidos y Francia propusieron un alto el fuego de 21 días. El presidente estadounidense Joe Biden y su homólogo francés Emmanuel Macron coordinaron esta iniciativa durante la Asamblea. Sin embargo, la oficina de Netanyahu indicó que el primer ministro no había respondido a la propuesta, ordenando en su lugar "continuar los bombardeos al máximo".

La intensificación de los ataques israelíes en la frontera con el Líbano ha resultado en más de 700 muertes y el desplazamiento de más de 118.000 personas desde el lunes. La ONU ha calificado esta escalada como el "periodo más mortífero en una generación" en la región.

La crisis humanitaria en Gaza y el Líbano ha sido objeto de preocupación internacional. La Franja de Gaza, conocida por tener una de las densidades de población más altas del mundo, enfrenta desafíos significativos en términos de reconstrucción y ayuda humanitaria.

Netanyahu reiteró que "Hamas debe irse" y no tendrá ningún papel en la reconstrucción de Gaza, prometiendo continuar la lucha hasta la "victoria total". Esta postura plantea interrogantes sobre el futuro de la región y la posibilidad de una resolución pacífica del conflicto.

La comunidad internacional, representada por la ONU, que ha emitido numerosas resoluciones relacionadas con el conflicto israelí-palestino, se encuentra en una posición delicada para mediar en esta crisis. El éxodo masivo de civiles debido a los conflictos sigue siendo un problema global que afecta a millones de personas.

"Tengo un mensaje para los tiranos de Teherán: si nos atacan, los atacaremos"

Mientras la situación continúa desarrollándose, la comunidad internacional observa con preocupación la escalada del conflicto y sus implicaciones para la estabilidad regional y global.