Israel lanza ataques devastadores contra Líbano: 558 muertos
Israel realiza los bombardeos más intensos en Líbano desde 2006, causando 558 víctimas mortales. El ministro de Salud libanés informa que la mayoría eran civiles no armados.
En un dramático escalamiento de tensiones, Israel ha llevado a cabo una serie de ataques aéreos contra Líbano, marcando la ofensiva más intensa desde la guerra de 2006. Estos bombardeos, ocurridos el lunes 23 de septiembre de 2024, han resultado en un saldo trágico de 558 víctimas mortales, según informó el ministro de Salud libanés, Firas Abiad.
Durante una conferencia de prensa celebrada el martes 24 de septiembre, Abiad reveló que entre los fallecidos se encuentran 50 niños y 94 mujeres. El funcionario enfatizó que la mayoría, si no la totalidad, de las víctimas eran civiles desarmados que se encontraban en sus hogares al momento de los ataques.
Esta escalada de violencia se produce en un contexto de tensiones históricas entre Israel y Hizbulá, una organización fundada en 1985 durante la guerra civil libanesa. Hizbulá, cuyo nombre significa "Partido de Dios" en árabe, ha sido un actor clave en el conflicto regional, recibiendo apoyo financiero y militar de Irán.
Es importante recordar que Israel y Líbano técnicamente continúan en estado de guerra desde 1948. La frontera entre ambos países, conocida como la Línea Azul, ha sido escenario de numerosos enfrentamientos a lo largo de los años. La Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano (UNIFIL) opera en esta zona desde 1978, intentando mantener la estabilidad.
La guerra de 2006 entre Israel y Hizbulá, que duró 34 días, causó más de 1.000 muertes en Líbano y 165 en Israel. Desde entonces, la tensión ha persistido, exacerbada por la participación de Hizbulá en la guerra civil siria apoyando al gobierno de Assad.
Hizbulá, liderado actualmente por Hassan Nasrallah, ha desarrollado un arsenal de misiles que representa una amenaza constante para Israel. Esta capacidad militar, combinada con su brazo político y su control sobre gran parte del sur del Líbano, ha complicado aún más las relaciones entre ambos países.
Israel justifica sus recientes ataques argumentando que apuntaban a cientos de objetivos de la milicia. Sin embargo, el alto número de víctimas civiles ha generado preocupación internacional. La comunidad internacional observa con atención, recordando que la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin a la guerra de 2006, buscaba establecer una paz duradera.
Este último episodio de violencia subraya la fragilidad de la situación en la región y el impacto devastador que el conflicto continúa teniendo en la población civil. La comunidad internacional enfrenta ahora el desafío de prevenir una nueva escalada y buscar soluciones diplomáticas para abordar las tensiones subyacentes entre Israel y Hizbulá.
"La gran mayoría, si no todos, eran personas no armadas que se encontraban en sus casas"
