Israel intensifica conflicto regional con ataques en Siria

Israel amplía su ofensiva bombardeando Siria para cortar suministros a Hizbulá. Testigos en Líbano relatan recientes ataques, evocando la invasión de 1982 y aumentando temores de una guerra más amplia.

4 de octubre 2024, 20:56  •  102 vistas

Israel intensifica conflicto regional con ataques en Siria

El conflicto en Oriente Próximo ha entrado en una nueva fase de escalada, con Israel extendiendo sus operaciones militares más allá de sus fronteras inmediatas. El Dr. Hatem Yehya, oftalmólogo en Nabatiye, Líbano, se ha convertido en testigo directo de esta intensificación bélica que amenaza con desestabilizar aún más la región.

El 17 de septiembre de 2024, Nabatiye fue escenario de un trágico incidente cuando explosiones de buscapersonas causaron numerosas víctimas. El Dr. Yehya relata: "Atendimos a más de 250 personas afectadas por las explosiones. Muchos eran miembros o simpatizantes de Hizbulá, pero también hubo civiles entre los heridos".

Este suceso se enmarca en un contexto de creciente tensión regional. Israel ha llevado a cabo bombardeos en Siria con el objetivo declarado de impedir el suministro de armas a Hizbulá, una organización político-militar libanesa fundada en 1985 y considerada terrorista por varios países occidentales.

La situación actual evoca dolorosos recuerdos de conflictos pasados. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha hecho referencia a la invasión del Líbano en 1982, liderada por Ariel Sharon, entonces ministro de Defensa. "Sabemos lo que pasó en 1982. Dijeron que iban a entrar 40 kilómetros y destruyeron Beirut", recordó Netanyahu, sugiriendo una posible estrategia similar.

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La población civil se encuentra una vez más en el centro de este conflicto multifacético. El Líbano, con una población de aproximadamente 6.8 millones de habitantes, ya enfrenta una grave crisis económica desde 2019. La amenaza de una nueva guerra amplía las preocupaciones humanitarias en un país que ha experimentado múltiples conflictos desde su independencia en 1943.

La comunidad internacional observa con preocupación el desarrollo de los acontecimientos. La UNIFIL, presente en el sur del Líbano desde 1978, se enfrenta a un panorama cada vez más complejo. La Línea Azul, establecida por la ONU en 2000 como demarcación entre Líbano e Israel, se ve nuevamente amenazada por las tensiones crecientes.

El río Litani, históricamente un punto de disputa, y la frontera de 79 kilómetros entre Líbano e Israel, son áreas de particular atención. Mientras tanto, en Siria, país inmerso en una guerra civil desde 2011, los ataques aéreos israelíes añaden una capa adicional de complejidad al conflicto regional.

La situación actual pone de manifiesto la fragilidad de la paz en Oriente Próximo y la interconexión de los conflictos en la región. El cedro, símbolo nacional del Líbano, se erige como un recordatorio silencioso de la resistencia y la esperanza de un pueblo que anhela la paz en medio de la tormenta geopolítica que azota la región.