Eva Yerbabuena deslumbra en Sevilla con su espectáculo "Solo a Sevilla"
La bailaora granadina presenta su decimonoveno espectáculo en el Teatro de la Maestranza, mostrando la belleza del flamenco en movimiento. Una actuación que combina técnica, expresividad y profundidad emocional.
En el emblemático Teatro de la Maestranza de Sevilla, Eva Yerbabuena ha presentado su decimonoveno espectáculo, "Solo a Sevilla", demostrando una vez más por qué es considerada una de las figuras más destacadas del flamenco contemporáneo. Este evento, que tuvo lugar el 25 de septiembre de 2024, forma parte de la prestigiosa Bienal de Flamenco de Sevilla, uno de los festivales más importantes del mundo en este género.
El espectáculo de Yerbabuena es un viaje por diferentes palos del flamenco, comenzando con una impresionante soleá por bulería. Esta pieza, que duró aproximadamente quince minutos, exigió una gran concentración por parte del público debido a su intensidad técnica y emocional. La soleá, uno de los palos más antiguos del flamenco, requiere un dominio técnico excepcional y la capacidad de transmitir profundos sentimientos, algo que Yerbabuena logró con maestría.
Posteriormente, la bailaora presentó una coreografía con bata de cola y cascabeles, acompañada por la voz en off del legendario cantaor Pepe Marchena. La bata de cola, elemento característico del vestuario flamenco femenino, fue manejada con gran destreza por Yerbabuena, demostrando su habilidad técnica.
Un momento destacado fue la actuación de Esperanza Garrido, sobrina de Yerbabuena, quien interpretó una granaína y media granaína de Manuel Vallejo. Este cante, originario de Granada, es una derivación de los fandangos y requiere gran sensibilidad interpretativa.
El espectáculo continuó con un baile por tiento, donde Yerbabuena mostró su delicadeza y control corporal, adaptándose perfectamente a los elementos percusivos y al ritmo del cante. La percusión flamenca, que incluye instrumentos como el cajón, las palmas y los pitos, jugó un papel fundamental en esta sección.
En el taranto y la levantica, Yerbabuena demostró su versatilidad, resolviendo el baile desde distintos registros rítmicos. El taranto, un palo originario de Almería relacionado con los cantes de las minas, fue interpretado con una sutileza y poesía notables.
El clímax del espectáculo llegó con los tangos, donde Yerbabuena compartió escenario con las cantaoras Marina Heredia y La Fabi. Los tangos flamencos, con su ritmo alegre y bailable, permitieron a Yerbabuena mostrar su dominio de los acentos y su pasión interpretativa, recorriendo estilos desde Badajoz hasta Granada, pasando por el emblemático barrio sevillano de Triana.
El espectáculo concluyó con fandangos y cantiñas, donde Yerbabuena lució nuevamente la bata de cola y el mantón de Manila. Las cantiñas, un grupo de cantes festeros originarios de Cádiz, sirvieron como broche de oro para una actuación que combinó lo conceptual con lo ilustrativo.
La música original de Paco Jarana proporcionó un soporte perfecto para las coreografías de Yerbabuena, creando nuevas dimensiones creativas y sugerentes. El diseño de luces y el sonido fueron ejemplares, contribuyendo a la atmósfera única del espectáculo.
"En 'Solo a Sevilla', he querido profundizar en el lenguaje jondo hasta desnudar mi alma a través del baile."
"Solo a Sevilla" no solo demostró la técnica impecable de Yerbabuena, sino también su capacidad para transmitir el "duende", ese estado de inspiración y autenticidad tan valorado en el flamenco. La bailaora logró combinar la tradición con elementos innovadores, recordándonos por qué el flamenco fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2010.
En resumen, Eva Yerbabuena ha ofrecido un espectáculo que reafirma su posición como una de las figuras más importantes del flamenco actual, demostrando que este arte sigue vivo y en constante evolución.
