Decomisan 200 kg de alimentos podridos en restaurante chino de Madrid
La policía descubre condiciones insalubres y especies protegidas en un local de Usera. Los propietarios enfrentan cargos por delitos contra la salud pública y la fauna.
En un reciente operativo policial en el distrito madrileño de Usera, conocido por su significativa población china, se descubrió una situación alarmante en un restaurante local. Agentes de la Policía Municipal hallaron aproximadamente 200 kilogramos de carne y pescado en estado de descomposición durante una inspección rutinaria el 26 de septiembre de 2024.
El establecimiento, ubicado en la calle Nicolás Usera, nombrada en honor a un destacado empresario del siglo XIX, presentaba condiciones higiénico-sanitarias deplorables. Los agentes observaron múltiples irregularidades, incluyendo el uso indebido de espacios y la presencia de alimentos sin etiquetado adecuado.
Entre los hallazgos más preocupantes se encontraban productos alimenticios con fechas de caducidad vencidas hace más de tres años. La trazabilidad de los alimentos, crucial para garantizar la seguridad alimentaria, era inexistente en muchos casos. Además, se descubrieron verduras secándose directamente sobre cartones y el suelo, una práctica que, aunque común en algunas cocinas asiáticas, no cumple con las normas de higiene españolas.
Los inspectores también encontraron un arcón congelador sin termómetro de control, conteniendo diversos tipos de carne y pescado mezclados sin protección. Esta situación plantea serios riesgos de contaminación cruzada, que puede ser peligrosa para la salud de los consumidores.
Sorprendentemente, se hallaron 600 especímenes de holoturias deshidratadas, conocidas como pepinos de mar y apreciadas en la gastronomía china. Estas especies están protegidas por el convenio CITES, que regula el comercio internacional de especies amenazadas desde 1975.
Como resultado de estas graves infracciones, los propietarios del restaurante enfrentarán cargos por delitos contra la flora y fauna, así como por poner en riesgo la salud pública. Es importante recordar que en España, los delitos contra la salud pública pueden conllevar penas de prisión.
Este incidente subraya la importancia de las inspecciones regulares en establecimientos alimentarios y el cumplimiento de las estrictas normas de higiene y seguridad alimentaria vigentes en España. También refleja los desafíos que pueden surgir con el crecimiento de comunidades inmigrantes, como la china en Madrid, y la necesidad de asegurar que todos los negocios operen dentro del marco legal y sanitario establecido.
