Biden respalda el ataque a Nasrala en medio de tensiones regionales
El presidente de EE.UU. apoya la eliminación del líder de Hizbulá, mientras busca un alto al fuego. La muerte de Nasrala genera reacciones diversas en la política estadounidense y complica los esfuerzos diplomáticos.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha respaldado la eliminación de Hasan Nasrala, líder de Hizbulá, en un ataque aéreo israelí, calificándolo como un "acto de justicia". Esta acción militar se produce en un contexto de crecientes tensiones en la región, casi un año después del ataque de Hamas del 7 de octubre de 2023.
Biden afirmó que Nasrala era responsable de la muerte de cientos de estadounidenses durante su "reinado del terror" de cuatro décadas. Hizbulá, fundada en 1985 como respuesta a la ocupación israelí del sur del Líbano, ha sido considerada una organización terrorista por varios países occidentales y ha sido acusada de participar en actividades criminales internacionales.
El apoyo de Washington a Tel Aviv se mantiene firme, con el presidente estadounidense reafirmando el derecho de Israel a defenderse contra Hizbulá, Hamas y otros grupos respaldados por Irán. Esta postura se ve reforzada por la comunicación entre el secretario de Defensa estadounidense, Lloyds Austin, y su homólogo israelí, Yoav Gallant.
El Partido Republicano ha mostrado un entusiasmo aún mayor por la acción israelí. El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, calificó a Nasrala de "marioneta del régimen iraní" y criticó los esfuerzos de la administración Biden por lograr un alto al fuego.
A pesar de la escalada de violencia, el gobierno de Biden insiste en buscar una solución diplomática. Sin embargo, sus esfuerzos parecen caer en oídos sordos en Israel, que lanzó el ataque contra Nasrala poco después de que EE.UU. y Francia pidieran una tregua de tres semanas en Líbano.
La muerte de Nasrala podría tener implicaciones significativas para la política interna estadounidense. Aunque aproximadamente el 70% del voto judío en EE.UU. es demócrata, esta comunidad apoya las acciones militares contra Hizbulá. Además, la influyente comunidad de descendientes de cristianos libaneses en EE.UU. generalmente se opone a Hizbulá, un grupo chií radical.
Es importante destacar que Hizbulá, liderada por Nasrala desde 1992, ha desarrollado un arsenal de misiles que amenaza a Israel y mantiene una red de túneles en la frontera líbano-israelí. La organización también ha sido acusada de reclutar niños soldados en el pasado y de participar en el tráfico de drogas para financiar sus operaciones.
"La muerte de Hasan Nasrala en un ataque aéreo israelí es un acto de justicia por sus muchas víctimas, entre las que están miles de civiles estadounidenses, israelíes y libaneses".
La situación actual plantea desafíos significativos para la administración Biden, que busca equilibrar el apoyo a Israel con los esfuerzos por desescalar el conflicto en la región. Mientras tanto, la muerte de Nasrala marca un punto de inflexión en la historia de Hizbulá y podría tener repercusiones duraderas en la geopolítica del Medio Oriente.
