En el corazón de Kiev, una de las ciudades más antiguas de Europa del Este fundada en el siglo V, se alza un sombrío recordatorio de la guerra en curso. Un transformador calcinado, vestigio de una de las centrales eléctricas más afectadas de Ucrania, ha sido instalado en la histórica Plaza Kontraktova, conocida por su importancia comercial desde el siglo XV.
Esta exposición, inaugurada recientemente, es fruto de la colaboración entre la empresa energética privada DTEK, una organización no gubernamental y el Ministerio de Energía de Ucrania. Su objetivo es concienciar sobre los desafíos que enfrenta el sector energético del país.
Los ataques rusos contra la infraestructura energética ucraniana han sido devastadores. Según Herman Halushchenko, Ministro de Energía, se han registrado más de 1.000 ataques contra la red eléctrica nacional. La ONU informa que entre marzo y agosto de 2024, nueve ataques coordinados destruyeron aproximadamente 9 gigavatios de capacidad de generación eléctrica, lo que representa la mitad de las necesidades energéticas de Ucrania durante el invierno.
"Este invierno ya será bastante malo, con la gente probablemente teniendo que hacer frente a apagones programados en todo el país. Cualquier ataque adicional que provoque cortes de electricidad prolongados podría tener consecuencias catastróficas".
La situación ha llevado a Ucrania a depender en gran medida de sus tres centrales nucleares operativas y de las importaciones de electricidad de la Unión Europea. Es importante destacar que Ucrania posee 15 reactores nucleares en cuatro centrales nucleares activas, incluyendo la central de Zaporizhzhia, la más grande de Europa.
El impacto en la vida cotidiana es significativo. Dmytro Tiuzin, un informático de 37 años, expresó su preocupación: "Trabajo a distancia y dependo mucho de la electricidad y de Internet". Esta situación refleja la realidad de muchos ucranianos que se enfrentan a la incertidumbre energética.
La reconstrucción del sector energético será un desafío monumental. La Escuela de Economía de Kiev estima que se necesitarán 50.000 millones de dólares para restaurar el sector. Esto es particularmente relevante considerando que el sector energético representa alrededor del 12.6% del PIB de Ucrania.
A pesar de las dificultades, Ucrania continúa buscando soluciones. El país tiene un potencial significativo para la energía renovable y ha estado trabajando en la diversificación de sus fuentes de energía desde 2014. Además, la red eléctrica de Ucrania se conectó a la red europea en marzo de 2022, lo que proporciona cierta estabilidad.
La exposición del transformador dañado permanecerá en Kiev durante los próximos dos meses, sirviendo como un poderoso recordatorio de los desafíos que enfrenta el país. Como dijo Serhii, un trabajador de la central eléctrica: "A veces se me saltan las lágrimas al ver esto", pero también expresó su determinación de no rendirse, "pase lo que pase".