Un reciente informe del Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF) ha revelado significativas disparidades en la carga fiscal local entre las ciudades españolas. Este estudio, que analiza los impuestos municipales, destaca el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) como la principal fuente de ingresos para los ayuntamientos.
El IBI, introducido en España en 1988, representa en promedio el 66% de los ingresos por impuestos locales. Este impuesto, que grava la propiedad inmobiliaria, varía considerablemente entre municipios debido a factores como el valor catastral y los tipos impositivos aplicados por cada ayuntamiento.
Madrid se posiciona como la capital de provincia con la mayor recaudación de IBI, alcanzando 470,6€ por habitante en 2023. En contraste, Pamplona registra la menor recaudación con apenas 146,4€ por ciudadano. Esta diferencia de 324€ ilustra la amplia brecha existente en la presión fiscal a nivel local.
Barcelona, la segunda ciudad más poblada de España, sigue a Madrid con una recaudación de 449,2€ por habitante. En el extremo opuesto, Bilbao, conocida por su transformación urbana desde los años 90, recauda 161,2€ por habitante.
La variación en las tasas del IBI es notable. Gerona, ciudad con rica historia romana, aplica la tasa más alta con un 1,005%, mientras que Zaragoza y Santander mantienen las más bajas con un 0,4%. Esto resulta en diferencias significativas en la cuota tributaria para inmuebles de valor similar.
El informe también analiza los cambios en las cuotas del IBI entre 2018 y 2023. Gerona ha experimentado el mayor aumento, mientras que Palma de Mallorca y Barcelona han reducido sus cuotas considerablemente.
Es importante destacar que el sistema fiscal español se divide en tres niveles: estatal, autonómico y local. Los ayuntamientos gozan de cierta autonomía fiscal dentro de los límites legales establecidos, lo que explica parte de estas variaciones.
Considerando todos los impuestos locales, incluyendo el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) y el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), la diferencia en la carga fiscal total alcanza los 566€ por habitante. Madrid lidera con 1.001€, mientras que Pamplona, conocida por sus fiestas de San Fermín, presenta la menor presión fiscal con 435€.
Este análisis refleja la complejidad del sistema tributario local en España y subraya la importancia de considerar estos factores al elegir una ciudad de residencia o inversión inmobiliaria.