La Costa del Sol, situada en la provincia de Málaga, es un tesoro del sur de España que abarca más de 160 kilómetros de litoral mediterráneo. Esta región no solo es famosa por sus playas doradas, sino también por sus encantadores pueblos blancos que salpican tanto la costa como el interior. Aunque la belleza está en el ojo del espectador, es innegable el atractivo de cinco localidades que merecen una visita especial.
Casares, reconocido por National Geographic como uno de los pueblos más hermosos de España, es un destino imperdible a una hora y media de Málaga capital. Este pueblo blanco, cuna de Blas Infante, considerado el padre de la patria andaluza, destaca por su castillo en ruinas, calles estrechas y fachadas encaladas. Los aficionados al golf disfrutan en campos como Finca Cortesín, sede de importantes torneos internacionales. Para los amantes del agua, la Alcazaba Lagoon, la mayor laguna de agua salada de Europa, ofrece una experiencia refrescante.
Estepona ha experimentado una transformación notable en su centro histórico, convirtiéndose en un imán para visitantes y residentes. El proyecto de embellecimiento urbano con coloridas macetas ha dado un toque distintivo a sus calles empedradas y patios tradicionales. El Orquidario, el más grande de Europa, es otra atracción imperdible. La Plaza de las Flores y la Iglesia de Nuestra Señora de los Remedios son paradas obligatorias en un recorrido por este pueblo que combina la esencia andaluza con un toque cosmopolita.
Mijas, dividido entre el pueblo montañoso y la zona costera de La Cala, ofrece lo mejor de ambos mundos. Conocido por sus burro-taxis, una atracción turística única, Mijas pueblo cautiva con sus calles floridas y miradores panorámicos. El Carromato de Mijas, un curioso museo de miniaturas alojado en un antiguo carro de madera, añade un toque de encanto peculiar. En la costa, playas como El Bombo, famosa por sus formaciones rocosas, invitan al relax y al disfrute del mar.
Marbella, más allá de su fama por el lujo y Puerto Banús, esconde un casco antiguo que conserva la esencia de un auténtico pueblo andaluz. La Plaza de los Naranjos, datando del siglo XV, es el corazón de este encantador rincón. El paseo marítimo, con sus 7 kilómetros de longitud, alberga una colección única de esculturas de Salvador Dalí al aire libre, instaladas en la década de 1990, ofreciendo un contraste fascinante entre arte y naturaleza.
Por último, Nerja, conocida como el Balcón de Europa, cautiva con su mirador construido sobre los restos de una fortaleza del siglo IX. Este pueblo, escenario de la icónica serie "Verano Azul" emitida entre 1981 y 1982, combina historia, cultura y belleza natural. Las Cuevas de Nerja, descubiertas en 1959, albergan importantes pinturas rupestres. La playa de Burriana, una de las más populares, y la cercanía a los acantilados de Maro completan el atractivo de esta joya de la Costa del Sol.
Estos cinco pueblos, cada uno con su carácter único, representan la diversidad y el encanto de la Costa del Sol malagueña. Desde la historia y la cultura hasta las playas y la gastronomía, ofrecen una experiencia completa del sur de España, invitando a los visitantes a descubrir la belleza y la autenticidad de esta región mediterránea.